Abrir un salón de manicura en España implica cumplir con una variedad de normativas legales diseñadas para garantizar la seguridad y salud de clientes y empleados. Aquí desglosamos los requisitos esenciales, junto con las especificidades aplicables en ciudades como Madrid y Barcelona.
-
Higiene y desinfección
La limpieza y desinfección adecuada son clave en este tipo de negocio para evitar infecciones y garantizar un ambiente seguro. Esto implica:
- Desinfección de herramientas: Todos los instrumentos que entren en contacto con clientes (limas, tijeras, cortauñas, etc.) deben ser desinfectados tras cada uso. La esterilización mediante autoclave es el método más recomendado y puede ser inspeccionado por las autoridades sanitarias.
- Uso de productos desechables: Se deben usar elementos de un solo uso, como toallas y guantes, para minimizar riesgos.
- Higiene personal del personal: El equipo debe usar mascarillas, guantes y ropa adecuada para evitar la exposición a productos químicos y microorganismos.
-
Uso de productos cosméticos regulados
Los productos cosméticos utilizados deben cumplir con el Real Decreto 1599/1997 sobre productos cosméticos. Esto incluye:
- Homologación: Solo se pueden emplear productos autorizados por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS).
- Etiquetado: Los productos deben estar correctamente etiquetados, indicando composición, fecha de caducidad, y advertencias de uso.
- Almacenamiento: Los cosméticos deben almacenarse en condiciones adecuadas, evitando la exposición a la luz solar directa o temperaturas extremas.
-
Licencia de apertura y actividad
Antes de abrir, es obligatorio contar con una licencia de actividad emitida por el ayuntamiento correspondiente. Los pasos incluyen:
- Solicitud de la licencia: Dependiendo del municipio, se presenta el proyecto técnico del local, elaborado por un arquitecto o ingeniero.
- Inspección del local: Las autoridades verificarán si el espacio cumple con requisitos como ventilación, accesibilidad, salidas de emergencia, y áreas separadas para cada tipo de actividad.
- Zonificación: En Barcelona, se deben considerar restricciones como la suspensión de licencias en ciertas áreas céntricas
-
Condiciones del local
El espacio debe adaptarse a las normativas específicas sobre salud y seguridad:
- Área de trabajo adecuada: Cada estación debe disponer de suficiente espacio y contar con extractores de aire para manejar polvo y olores.
- Botiquín de primeros auxilios: Obligatorio y debe incluir material básico como gasas, antisépticos y apósitos.
- Accesibilidad: El local debe cumplir con las normativas de accesibilidad para personas con movilidad reducida.
-
Prevención de riesgos laborales
Para proteger la salud del personal, es obligatorio implementar medidas de prevención conforme a la Ley de Prevención de Riesgos Laborales (Ley 31/1995). Esto implica:
- Formación del personal: Los empleados deben recibir capacitación sobre el uso seguro de productos químicos y ergonomía en el trabajo.
- Evaluación de riesgos: Identificar peligros específicos en el entorno laboral, como la exposición prolongada a productos químicos o la postura repetitiva.
- Equipos de protección individual (EPIs): Mascarillas, gafas de protección y guantes son imprescindibles.
-
Gestión de residuos
El negocio debe implementar un sistema eficiente para manejar residuos, especialmente aquellos clasificados como peligrosos:
- Residuos químicos: Los productos como esmaltes, removedores y desinfectantes deben desecharse según las normas locales.
- Contenedores específicos: Es obligatorio contar con recipientes adecuados para residuos biológicos o materiales contaminados.
- Contratos con gestores autorizados: En algunos casos, será necesario contratar empresas especializadas en la gestión de residuos peligrosos.
Diferencias entre Madrid y Barcelona
Aunque las regulaciones básicas son nacionales, cada ciudad introduce particularidades:
- Madrid: La ordenanza municipal exige condiciones específicas de ventilación y seguridad eléctrica. Además, el cumplimiento de horarios comerciales y control de ruidos es más estricto
- Barcelona: En el centro de la ciudad, las licencias están restringidas para evitar saturación de negocios de estética. Se recomienda consultar con las autoridades locales para verificar restricciones en áreas específicas
-
Otros requisitos
- Seguro de responsabilidad civil: Es obligatorio contar con un seguro que cubra posibles accidentes o reclamaciones de los clientes.
- Certificado de Manipulación de Productos Cosméticos: Algunas comunidades autónomas exigen este certificado para garantizar un uso seguro y profesional.
Cumplir con estas normativas no solo asegura que el negocio opera dentro de la legalidad, sino que también genera confianza entre los clientes. Planificar adecuadamente y consultar con expertos legales locales es clave para un inicio exitoso.